jueves, 27 de enero de 2022

Presentación del Aula Arcannum 2022



Os adjunto el video de presentación del programa del Aula Arcannum para el 2022.
Próximamente os iremos informando del calendario de cursos y eventos que iremos realizando. 


viernes, 17 de septiembre de 2021

¿Te afecta la Psicosis Mundial?

Un video excelente e imperdible para reflexionar, ponerlo todo en duda y sobre todo, formarse una opinión propia y siempre con tu libre criterio.

Ahí lo dejo...

lunes, 9 de agosto de 2021

Oráculo del I Ching para los meses de agosto y septiembre de 2021

Para los meses de agosto y septiembre, el Hexagrama que marcará su evolución es el 31 “El Influjo”, sin líneas mutantes, lo cual ya, de entrada, nos indica que nos encontramos en un periodo en el que se describe una situación fija, estática, permanente y sin variaciones.

El Hexagrama 31 nos habla de ganar influencia sobre el entorno, sobre los individuos y por extensión, sobre la sociedad.

En la predicción para el mes de julio señalábamos que eran tiempos en los que, ante las incógnitas de un futuro incierto y ausente de la luz suficiente como para discernir el camino a seguir, lo aconsejable era mantenerse firme como una Montaña, o dicho de otro modo, mantener la Quietud a la espera de poteriores acontecimientos.

A lo largo de los meses de agosto y septiembre, el escenario aún permanece inmerso en la incertidumbre, aunque se ha producido un cambio importante: la Montaña, que entre sus muchos significados y analogías, representa a aquellos que tienen capacidad para dirigir y el cambio de paradigma en el que nos encontramos, rodea al Lago, que representa el agua, símbolo dador y origen de la vida, de lo que fluye de forma permanente y cambiante. Aquí, el agua toma la forma de un Lago contenido por la Montaña. 

De este modo el poder del Agua se encuentra contenido y limitado por la Montaña , la cual constriñe su esencia simbólica. Este es un punto muy importante en el análisis que estamos desarrollando ya que la Montaña contiene al Lago, le da forma y lo inmoviliza.

Dicho esto: el momento que vamos a vivenciar durante los meses de agosto y septiembre son tiempos en los que aún nada está terminado ni nada decidido pero en la que nos encontramos en tránsito hacia el Nuevo Paradigma que viene.

Durante estos dos meses no debemos esperar cambios bruscos ni mucho menos culminaciones de los procesos que están en marcha, sino que serán tiempos en los que se manifestarán actuaciones sutiles para influir en la opinión en la que los “expertos” jugarán un papel esencial para formar una corriente de opinión mayoritaria que vaya modelando de forma sutil a la vez que decisiva, al Cambio de Paradigma que está por venir.

La estrategia que gobierna este proceso no puede ser el de la acción drástica sino por el contrario, debe ser resultado de una actuación sutil, que gane adhesiones sociales de forma voluntaria y que no provoque rechazos y evite resistencias que podrían enconarse y ser origen de tensiones sociales no deseadas.

¿Hacia donde se dirige esta estrategia de Cambio de Paradigma en la que nos encontramos inmersos?

La respuesta es clara: hacia un Horizonte Vital que exigirá sacrificios, renuncias y pasos atrás en la manera en como estábamos acostumbrados a ver y organizar nuestras vidas de un tiempo a esta parte porque de lo que se trata es de construir un nuevo Sistema de organización social que sea capaz de gestionar la escasez para poder hacer frente a los retos del futuro que está por venir y la estrategia que por el momento rige este proceso de largo alcance, no es otro que el de conseguir el máximo consenso social con el mínimo de tensiones y de daños posibles colaterales.

Nos encontramos en estos dos meses a los que se refiere el Oráculo del I Ching en estos momentos liminales en los que el pasado, pasado está, pero en los que el futuro inmediato que está por venir aún no ha tomado su forma definitiva.

Esta consulta al Oráculo del I Ching para agosto y septiembre hace buena la sentencia del Sun-Tzu cuando nos dice:

“Dale a tu adversario aquello que no espera recibir. Así será capaz de confirmar sus creencias y con ello lograrás que actúe con patrones de conducta predecibles que lo mantengan ocupado. Mientras tanto, tú deberás esperar el momento adecuado para actuar”




miércoles, 28 de julio de 2021

El enigma de Fuxi y Nü Wa

El símbolo es un rasgo de la realidad que, para todo aquel ser despierto, designa inmediata y evidentemente algo que no puede comunicarse por medio del intelecto pero que contiene en sí mismo su propia evidencia.
Esta reflexión personal me sirve como introducción para compartir hoy con vosotros una aproximación muy personal a la representación iconográfica de Fuxi Nü Wa, la Pareja Primordial de la cosmogonía de la antigua China y que siempre me ha fascinado e inquietado a la vez.
Pero empecemos por el principio.
El mito nos cuenta que Fuxi (ca. 3.000 a.n.e) fue un misterioso soberanode la cultura china del Neolítico, mitad humano y mitad divino nacido a orillas del Rio Amarillo, al que se atribuye, ni más ni menos que el mérito de haber legado la civilización al ser humano.
Se cuenta que Fuxi, fue  dotado de los atributos de una suerte de Demiurgo
Ya desde su infancia, Fuxi podía viajar de la Tierra y el Cielo a través del Árbol Jianmu, que conectaba ambos mundos y que cada vez que volvía de su viaje y regresaba a la Tierra, traía un nuevo conocimiento para la Humanidad.
De todo su legado, la tradición nos cuenta que, de todos sus descubrimientos, el más trascendente fue el Ba Gua; los Ocho Trigramas que constituyen la base y el fundamento del I Ching.
En el Xi Zhi Zhuan, el Ala Quinta del I Ching de los Zhou (la versión del Libro de las Mutaciones que ha llegado hasta nuestros días) se nos relata en forma mítica como contempló Fuxi los Ocho Trigramas: “Fuxi miraba cuidadosamente las imágenes en el Cielo y en la Tierra, y pensaba en los patrones y colores de las aves y bestias, así como sobre la sostenibilidad de la tierra. Estos patrones e imágenes no solo incluían los de sus alrededores sino los de su propio cuerpo. Entonces creó los Ocho Trigramas para comunicar la virtud de las divinidades y parecerse a la naturaleza de todo en la tierra al observarlos escritos sobre el lomo de un animal mitológico mitad dragón y mitad caballo, que surgió del Río Amarillo”
Más de 2.000 años después, los Ocho Trigramas, se combinaron entre sí y de este modo se generaron los 64 Hexagramas del I Ching.
 
Fuxi y Nü Wa.

Según diferentes fuentes de la cosmogonía china, se relata que Fuxi y su hermana Nü Wa, fueron los dos únicos supervivientes de una Gran Inundación que acabó con toda forma de vida en la Tierra.
Enfrentados a la amenaza de extinción, Fuxi propuso a Nü Wa que deberían procrear entre ellos para volver a repoblar la Tierra. Nü Wa se mostró en principio reticente a la idea y sugirió a su hermano que antes de tomar esta decisión, debían tener el permiso de los dioses. 
Para ello decidieron subir a la Montaña Kunlun y cada uno encendió una hoguera para pedir la opinión a los dioses y acordaron que, si el humo de las hogueras se separaba el uno del otro, significaría que la unión no era aprobada. Por el contrario, si el humo de las dos hogueras se entrelazaba, se interpretaría como una aprobación del Cielo.
Y ocurrió que el humo de ambas hogueras se unió en una sola y Fuxi y Nü Wa confirmaron así su unión que dio origen a la nueva Humanidad. 
 
La representación iconográfica de Fuxi y Nü Wa.

Desde el año 1.000 a.n.e. ya encontramos representaciones iconográficas de la pareja Primordial en pinturas, bajorrelieves, telas, monumentos funerarios… que he de confesaros que, desde que me encontré con ellas, han supuesto un antes y un después en mi caminar por este oscuro juego de espejos y senderos que se bifurcan que es la inalcanzable búsqueda del Conocimiento.
Intentaré esbozar, de manera muy personal, algunos de los principales elementos de la representación de Fuxi y Nü Wa para compartirlos contigo.
Para empezar. 
Como podemos ver en la imagen, Fuxi y Nü Wa aparecen como dos seres zoomorfos, mitad humanos y mitad Serpiente o Dragón, con las colas enroscadas formando una doble hélice. 
Fuxi sostiene un Compás en la mano mientras que Nü Wa hace lo propio con una Escuadra.
La Escuadra y el Compás son símbolos constructivos que nos remiten a una primera idea clave: con el uso de ambas herramientas Fuxi y Nü Wa dan forma al Mundo y su Gran Obra es el resultado de la interacción entre el Yin y el Yang, los dos principios opuestos pero irreductiblemente complementarios el uno con el otro. 
Esta es una idea fundamental en el Pensamiento Chino en general y en el I Ching (que es su fuente inspiradora primigenia) en particular. 
Este principio es, además, uno de los pilares fundamentales de la Filosofía Perenne, y como es sabido, la Escuadra y el Compás son elementos esenciales en el simbolismo constructivo de la Francmasonería y el núcleo esencial de su Pensamiento y de su Método.
De este modo, mientras el Compás delimita un Círculo, la Escuadra delimita un Cuadrado y, como nos dice el I Ching: "El Cielo es redondo. La Tierra es cuadrada".
Así, el Compás contiene y realiza a la Escuadra y del mismo modo, la Escuadra, contiene y realiza al Compás. 
Ambos, siendo opuestos se complementan y cumpliendo funciones distintas, acaban por integrarse y transcenderse formando la Unidad.
En el Pensamiento Masónico el Compás, abierto en diversos grados, delimita simbólicamente la idea de la existencia de diferentes niveles de Conocimiento, o dicho de otro modo, del progreso del Espíritu sobre la Materia.
Así, un Compás abierto a 30 grados simboliza al Aprendiz, el iniciado que acaba de emprender su camino de Conocimiento.
La apertura del Compás a 45 grados representa al Compañero, el grado simbólico en el que pese al avance, la Materia aún no está completamente dominada por el Espíritu, estado que sólo se alcanza con la apertura del Compás a los 90 grados, que representa al Maestro Masón.
Es en este momento preciso, cuando Materia y Espíritu se transcienden y se alcanza con plenitud el equilibrio entre las dos fuerzas (Materia y Espíritu, Yin y Yang, Luz y Sombra…) momento en el cual el  Compás se convierte en la Escuadra Justa y Perfecta.
Dicho esto, podemos concluir que el Orden cósmico creado por Fuxi y Nü Wa representa la Gran Obra del Gran Arquitecto del Universo.
Nos toca ahora dar un paso más allá.
El Compás es un símbolo Yang mientras que la Escuadra un símbolo Yin, pero en la representación iconográfica de Fuxi y Nü Wa, ambas herramientas aparecen invertidas y así vemos en la imagen como Fuxi (Yang) sostiene la Escuadra (herramienta Yin, símbolo Terrestre) en su mano mientras que Nü Wa hace lo propio con el Compás (herramienta Yang, símbolo Celeste).
A priori, podríamos pensar que se trataría de un error, pero tal aseveración constituiría un error ya que esta disposición es de una lógica simbólica aplastante ya que la disposición “invertida” de la Escuadra y el Compás nos remite a la idea del movimiento eternamente alternante de los principios Yin y Yang, en el que el uno contiene al otro, lo cual nos ofrece otra clave esencial: la de la No Dualidad del Universo, otro pilar fundamental de la Filosofía Perenne.
En pocas palabras: “Como es Arriba, es Abajo. Como es Abajo es Arriba”.
Sigamos avanzando.
En la imagen podemos ver como Fuxi y Nü Wa, en su mitad inferior, toman la forma de dos dragones o serpientes entrelazadas. 
El origen del símbolo del Dragón se pierde en la noche de los tiempos y tiene una influencia decisiva en el Esoterismo de Oriente y de Occidente.
En nuestro contexto, su contemplación no puede sino remitirnos, entre otras muchas posibilidades, al significado simbólico del Dragón chino o en Occidente, al 
Caduceo de Hermes o al Ouroboros, en el que la Serpiente o el Dragón simbolizan a la Sabiduría.
Esto supone una ruptura radical con la desviación contrainiciática de Occidente que representa el pensamiento judeocristiano que separará radicalmente ambos principios y nos obligará, dogma mediante, a tomar partido exclusivo por el uno o por el otro, fracturando así nuestra propia íntima esencia y condenando a la civilización occidental una suerte de alienación, entendida como una pérdida del Sentido o de la Identidad.
Para culminar nuestro análisis.
Sobre la cabeza de la pareja aparece el Sol rodeado por doce discos, es decir, el círculo del año, mientras que en la parte inferior encontramos la Luna, igualmente, rodeada por los doce discos que forman el círculo del año.
El Sol, en el simbolismo tradicional chino está asociado con un cuervo de tres patas, que lleva por los aires al sol en su rutina diaria de nacimiento y ocaso, mientras que en la parte inferior la luna, con una rana y una liebre en su interior, nos remiten a símbolos femeninos y oscuros, nocturnos, aunque del bestiario simbólico del I Ching hablaremos otro día.
Rodeando a la Pareja Primordial podemos ver una constelación unida entre sí por líneas continuas, lo cual nos sugiere sutilmente la idea de la interconexión de los Universos conocidos y desconocidos.
 
Para terminar.
Dejaremos hoy y aquí nuestra reflexión, de la que sólo hemos esbozado algunas claves.
Y acabaremos como empezamos: recordando que el Símbolo, por su propia naturaleza, nos abre las puertas a múltiples significados que apelan siempre a la intuición del individuo que se adentra en su aprendizaje.
El Camino del Símbolo es inagotable, abierto e inexpresable y siempre apela al Conocimiento directo, personal, intransferible y sin intermediación alguna y siempre nos ofrece sutiles pistas que nos ayudan a Cruzar el Umbral para adentrarnos  en el Sendero del Conocimiento y levantar el Velo que oculta la Matriz Secreta del Universo.
Para recorrer este interminable camino, que está abierto a todos los seres humanos sin excepción, solo se requiere humildad, una firme disposición y la mente abierta.

lunes, 19 de julio de 2021

El Doppelgänger: cuando te encuentras cara a cara con tu doble.

¿Nunca os ha pasado que personas a la que conocéis muy bien y que os conocen muy bien, os han contado que, sin duda alguna, os han visto en lugares donde no estabais e incluso os han descrito con detalle como ibais vestidos, que os llamaron, que los mirasteis aunque no atendisteis a su llamada?

¿Si?. Pues a mí también me ha pasado tres veces en mi vida, pero lo que vieron mis (vuestros) conocidos, amigos o familiares, no fue a vosotros sino a vuestro Doppelgänger. A vuestro doble, en pocas palabras.

Y esto, cuando se produce con regularidad y es visto por más de una persona que os conoce muy bien, no es una confusión (que podría ser si solo fuera un caso) sino algo mucho más profundo e inquietantemente real. 

Vayamos paso a paso y empecemos por definir de que estamos hablando.

El Doppelgänger es el substantivo alemán que define al doble fantasmagórico de una persona viva. El término viene de doppel, que significa "doble" y gänger": "andante". 

El término Doppelgänger se utiliza para designar a cualquier doble (absolutamente real) de una persona. 

Comúnmente, la tradición lo ha utilizado para referirse al “doble malvado” de uno mismo, aunque pienso que el fenómeno anómalo tiene más que ver con la bilocación, hablando en términos de Parapsicología.

El mito (realidad) del Doppelgänger aparece, desde muy antiguo en las leyendas nórdicas y germánicas y siempre viene asociado a un augurio de muerte. De este modo, un Doppelgänger visto los por parientes, amigos o conocidos de una persona es señal de muy mal augurio, como afirmó el escritor sueco August Strindberg, imbuido sin duda alguna por el peso cultural y antropológico de la tradición nórdica: “quien ve a su doble es que va a morir”.

Os aseguro que Strindberg, a quien respeto enormemente por su extraordinaria obra literaria, se equivocaba porque yo, aunque no he visto personalmente a mi doble pero sí personas muy, muy cercanas a mí, sigo aquí.

Este fenómeno anómalo forteano tiene, como os decía, un larguísimo recorrido en la mitología, las leyendas y la literatura.

Lo podemos encontrar, entre muchos ejemplos, en Plauto, Shakespeare, Molière y el tema del Doppelgänger alcanzó un enorme impulso (aunque con una notable reinterpretación del fenómeno) durante el Romanticismo, con el “Frankenstein o El Moderno Prometeo” de Mary Shelley, E.T.A Hoffmann en su obra “Los Elixires del Diablo”, “William Wilson” de Edgar Allan Poe, en “El Extraño Caso del Doctor Jekyll y Mr. Hyde” de Robert Louis Stevenson, ”La Sombra” de Hans Christian Andersen o en “El Doble”, de Fiodor Dostoievski, entre otros, hasta llegar a un orizonte literario más contemporáneo en obras como “Rayuela” de Julio Cortázar, José Saramago en su relato “El Hombre Duplicado” o “El Vizconde Demediado” de Italo Calvino

Y si hablásemos de la presencia del Doppelgänger en el cine, menos brillante, no obstante que en la literatura, no acabaríamos.

¿Pero que es en realidad el Doppelgänger?

Más allá de la poderosa corriente de la leyenda o del mito y desde la imposibilidad de formular una explicación plausible a un fenómeno anómalo escurridizo pero vívidamente real para todos aquellos que lo hemos vivido en propia carne y más de una vez, no tanto por la propia percepción del fenómeno sino por los testimonios de terceros, mi formación cientifista como parapsicólogo, me remiten a referirme a la bilocación o, a veces, multilocación.

Esto es: la habilidad psíquica en la que un individuo u objeto se ubica (o parece estar ubicado) en dos lugares distintos al mismo tiempo.

La Bilocación no es un concepto nuevo (cuando hablo de “nuevo” no me refiero en ningún momento a la contrainiciática New Age) sino que está presente desde el Conocimiento Chamánico Primordial y después retomado por el Pensamiento Pagano, el Ocultismo y posteriormente y de manera extraordinariamente eficaz por el Misticismo Cristiano, Judío, Musulmán o Hindú. 

No puedo obviar en este punto que muchos “bilocadores cristianos” han sido elevados a la categoría de místicos, han acabado posteriormente siendo convertidos en Santos, como Isidro “El Labrador”, Maria Jesús de Agreda o el Padre Pio de Petralcina, para citar unos pocos y resaltar la habilidad de la Iglesia Católica para “arrimar el ascua a su dogmática sardina” y elevar hábilmente, un fenómeno anómalo a la categoría de milagro.

Más allá del terreno de la leyenda, del mito o del dogma, el fenómeno del Doppelgänger es algo muy real y físico en este objeto de Misterio que llamamos Mundo debe seguir siendo estudiado de forma estrictamente científica y más allá de cualquier idea preconcebida. 

Porque siempre, como decía Kant: “Atrévete a pensar por ti mismo”

Y si echas en falta una segunda opinión... pídesela sin miedo alguno a tu Doppelgänger. Probablemente entre los dos, hallaréis la respuesta correcta, porque...

Contraria Sunt Complementa!... E Pluribus Unum...!